¿Por qué utilizar energía solar?
La energía es imprescindible para el funcionamiento del mundo y para una mejor calidad de vida. Pero, de todo es sabido, que la energía es escasa y cara, por lo que es necesario buscar alternativas para el ahorro y su uso eficiente y no malgastarla en actividades innecesarias. Una excelente opción son las energías renovables, energía que se obtiene de fuentes naturales aparentemente inagotables, ya sea por la cantidad de energía que contienen o porque son capaces de regenerarse por medios naturales. Una buena alternativa es la energía solar, fuente directa o indirecta de energía de casi toda la energía que utilizamos. Consiste en recoger la energía del sol a través de paneles solares y convertirla en calor para obtener agua caliente para uso doméstico o industrial. En la actualidad, debido a la creciente demanda de energías renovables, ha aumentado la fabricación de células solares e instalaciones fotovoltaicas. En muchos hogares, invernaderos y locales, aprovechan la energía solar para calentar el ambiente y alimentar innumerables aparatos autónomos. Se busca beneficiarse al máximo las de ventajas que nos ofrece el sol, mediante el uso de colectores o paneles solares térmicos, para restringir el uso de la calefacción o aire acondicionado y ahorrar dinero. Se puede distinguir tres tipos de colectores térmicos solares:
- Colectores de temperatura baja: El calor proviene de absorbedores metálicos o no metálicos para aplicaciones como el calentamiento de agua para baño, piscinas y en general todas aquella aplicaciones industriales donde no se necesita más de 60° para el desarrollo de sus actividades.
- Colectores de temperatura media: Estos dispositivos están preparados para producir un calor útil entre 100 y 300°C. Se utilizan concentradores estacionarios y canales parabólicos que agrupan todo su calor mediante espejos dirigidos hacia un receptor de menor tamaño
- Colectores de alta temperatura: Entre ellos podemos distinguir los colectores de plato parabólico, la nueva generación de canal parabólico y los sistemas de torre central. Generan temperaturas superiores a los 500°C y se utilizan para generar electricidad termosolar y transmitirla a la red eléctrica. Normalmente estos sistemas son aplicados por productores independientes y se instalan en regiones donde las posibilidades de días nublados son escasos.